Por esta razón y por lo que representa el departamento de Santander en la consolidación de la independencia y en honor a los 300 hombres santandereanos que cayeron en combate, el gobernador Didier Tavera Amado conmemoró en Charalá un año más de la Batalla del Pienta, una gesta liderada por ‘bravos santandereanos’, que a puño limpio, con lanzas, garrotes, piedras y palos impidieron que cerca de 800 españoles llegaran el 7 de agosto de 1.819 a atacar al ejército de Simón Bolívar en el Puente de Boyacá.
Si estos valientes, no hubieran retrasado la llegada de los españoles, otra sería la historia. "Muchas veces no se cuentan las derrotas en las batallas, la historia solo le da protagonismo a las victorias, por eso, nosotros lo que queremos es exaltar que gracias a estos hombres que perdieron la vida para evitar el fortalecimiento de las tropas españolas, es que se logró el triunfo del 7 de agosto y por eso para nosotros es tan importante el 4 de agosto", manifestó el mandatario seccional.
Allí, con la participación de los alcaldes de Charalá, Coromoro, Ocamonte, Encino y El Socorro, los charaleños lucieron el pabellón antes de lo usual en todo el país, como un homenaje a las víctimas de este enfrentamiento. Por su parte, los estudiantes lideraron los desfiles de gala y la Policía y el Ejército Nacional hicieron lo propio con su desfile militar.
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